Alexis Gómez-Rosa. Pluróscopo: concretismos y pluralemas.

Hace 50 años (¡feliz aniversario!), el 21 de julio de 1969, Neil Armstrong se convirtió en el primer hombre en caminar sobre la superficie lunar. 16 años antes, Eugene Gomringer, poeta suizo-boliviano, publica Konstellationen (1953), anticipándose desde una configuración estelar, a esa colosal empresa norteamericana del alunizaje e inscribiendo sus textos en una constelación de modernidad igualmente deslumbrante.
Armstrong sobre la luna dio un primer paso y humanizó el satélite de la tierra. Gomringer contra la página fijó las nuevas estrellas de la vanguardia en ese cosmos de letras en movimiento que persiguen en la síntesis el ordenamiento de otra sintaxis. Una gramática que habrá de articular la insuficiencia del signo lingüístico.
Sería en otro julio, el de 1977, cuando el dominicano Alexis Gómez Rosa destaparía, en Casa de Teatro, su propia caja de los demonios con la primera exposición de poesía concreta en la República Dominicana, con el silencio total de la critica; pero en compañía de voces tutelares como las de los hermanos Augusto y Haroldo de Campos, Décio Pignatari (del grupo brasileño Noigandres) y la del dominicano Manuel Rueda, creador del Pluralismo.
Ahora hemos querido desempolvar y poner en circulación estos poemas visuales porque un golpe de azar me situó frente a esa otra cara del poeta Gómez Rosa, poco conocida y mucho menos estudiada. La sorpresa provocó que me hiciera eco de la invitación que Enriquillo Sánchez nos hiciera tantos años atrás, para penetrar en esa galaxia de números y letras que constituye Pluróscopo: un librito de hallazgos y revelaciones que hace malabares en la cuerda que se tensa y sostiene su economía léxica.

—MdA

pluroscopo

por Enriquillo Sánchez

Somos uno de los países más atrasados de la tierra pero producimos poesía concreta y pluralemas, es decir, literatura de primerísima vanguardia. No fabricamos la bomba atómica pero producimos poetas absolutamente al día. Después de todo, la imaginación solo cuesta imaginación.

Convertir la palabra en objeto y el discurso en masa aleatoria es una privilegio. Es un privilegio, llámesele como se le llame. ¿Es también privilegio cualquier otro tipo de literatura, posea o no un contenido “humano”? en la inversión de valores que nos ha tocado vivir el propio signo lingüístico ha perdido significado. El hombre no le dice nada al hombre. Solo quedan el significante, el reclamo visual, las formas, el juego.

Un juego desgarrador, por cierto, un juego que por no decir nada dice todo, todo lo que somos en una sociedad que nos asedia. Un juego de adultos que le exige al creador altas condiciones. Ese es el caso de Alexis Gómez Rosa. El reclama la participación –no hay arte sin publico –del lector y aun de los que no leen.

Nosotros recomendamos esa participación. Será, aunque angustioso, un acto moderno. Pongámonos al día. Alexis Gómez Rosa nos invita. Si nos quedamos fuera tengamos presente que el realizo su obra con talento y seriedad. Alexis Gómez Rosa es un hombre de profundas convicciones. Debemos conocerlo.

Lepidóptera grafía

a        a
l   d
a

mariposa
pasajera                 inscribe
colores de su estampa
centella
plasmo
refiere la mariposa
del tiempo el movimiento
colores habituales
adscrito yo fijo su fantasía
ociosa:
pluralemas         aire.
d        l
e

Arte poética

 

 

 

Concreción

 

Per accidens

Bergman litterae

Mecánica barroca

Homenaje a Ronaldo Azeredo.

Converso no verso
(Cuatro modelos para desorientar cibernautas)

Tres en uno


Publicado en Palotes de ¡Ahora!, Nº 693, Santo Domingo, 1977, pp. 42-56)